Como puedo saber si tengo ciatica o una falsa ciatica. Descubre si tu dolor proviene del sindrome del piramidal o de una verdadera hernia de disco.

¿Sufres ciática? ¿te has preguntado si se trata realmente de una verdadera ciática o de una falsa ciática?
Esta y otras muchas preguntas quedaran contestadas durante el vídeo.

Hola amigos, el abordaje y tratamiento de la ciática y la falsa ciática es completamente diferente, así que hoy voy a enseñaros unos consejos muy útiles para aprender a identificarlas y diferenciarlas.

Existen varios problemas de salud que causan dolor ciático, un dolor muy característico que puede llegar desde el glúteo hasta el pie. En esta ocasión vamos a aprender una serie de test que os ayuden a identificar el origen de vuestro dolor.

La causa mas frecuente del dolor ciático es la aparición de una hernia de disco. Solamente en estados unidos hay más de 3 millones de casos de ciática anualmente, entre los cuales 2.8 millones corresponden a un origen discal, y únicamente 200.000
a un síndrome del piramidal o falsa ciática.

Así que vamos a empezar con los test que nos sugieren la presencia de una verdadera ciática, causada por una hernia discal.

En el primer test nos tumbamos boca arriba. El terapeuta eleva la pierna dolorida hasta que note tirantez, aparición o aumento del dolor. Mantenemos la pierna en esa posición y llevamos la punta del pie hacia el paciente. Si el paciente nos dice que el dolor aumenta notablemente podríamos estar ante un caso de verdadera ciática causada por un pinzamiento nervioso. Si el paciente nota únicamente un ligero estiramiento en la zona del gemelo o isquiotibiales el test sería negativo.
Para que el test sea positivo el paciente debería declarar una aumento severo del dolor, a lo largo de la pierna incluso hasta el glúteo y la espalda baja.

Si no cuentas con ayuda puedes realizar un test similar. Sentado al borde de una mesa estiramos la pierna dolorosa y al final del movimiento flexionamos la punta del pie hacia nosotros.
Si este movimiento causa aparición o agravamiento del dolor, prueba flexionando la cabeza hacia delante.
Este movimiento cervical añade tensión y debería empeorar los síntomas.
Debemos diferenciar el aumento del dolor ciático del aumento de la tensión muscular en músculos como los isquiotibiales que se encuentra comúnmente acortados.

Un test también muy sencillo que puedes hacer sin ayuda de nadie, es intentar caminar sobre los talones y sobre las puntas de los pies. Si lo haces sin dificultad y sobre todo sin diferencia de fuerza en ambos lados, es que tu nervio esta enviando las señales correctamente al músculo y que la parte motora no se encuentra pinzada. Si por el contrario te cuesta levantar uno de los pies, o no
logras ponerte de puntillas, estaríamos ante un caso mas serio de compresión radicular.

La falsa ciática es producida en la mayoría de los casos por un síndrome del piramidal. El síndrome del piramidal o piriforme es una condición en la cual el músculo piramidal sufre una contractura o espasmo, que irrita el nervio ciático que pasa por debajo. Esto causa dolor en la región glútea y puede incluso dar lugar a dolor referido en la parte posterior y distal del muslo. La mayoría de las ocasiones y al contrario que la hernia discal, la falsa ciatica no se encontrará casi nunca acompañada de dolor lumbar.

Así que lo primero que deberías hacer es palpar la zona glútea de ambos lados en busca del musculo piramidal.
No te pido que lo localices, simplemente que notes con tus manos si notas un lado mas tenso que el otro. Desde la cadera dirige tus manos hacia las nalgas para encontrarlo.

A continuación testa su flexibilidad. Cruza las piernas y llevalas hacia el pecho con ayuda de las manos.
¿Notas un lado menos flexible que otro? ¿Mas tenso? Anota tus sensaciones. Si empiezas a notar que el
lado más doloroso es el lado más tenso es una sospecha de que quizás estes sufriendo un sindrome del piramidal.

Despues, somete al musculo a contracción. Tumbado de lado con las piernas flexionadas abre las rodillas entre sí.
Aplica una resistencia en tu rodilla y comprueba como se comporta el musculo. ¿Hay un lado más doloroso que otro a la contracción? ¿Se corresponde con el lado del dolor ciática?

Por último el test que más determinante para localizar el sindrome del piramidal es el siguiente:
Tumbamos al paciente boca abajo, flexionamos sus rodillas y dejamos caer las piernas a cada lado.
Si encontramos un acortamiento o disminución de la amplitud del lado más doloroso, y además encontramos
tensión a la palpación, menor flexibilidad al estirarlo, y dolor a la contracción activa, es decir si todo lo anterior
es positivo, es muy probable que nos encontremos ante un sindrome del piramidal.

Este diagnostico debería ser confirmado por un profesional de la salud.